Tengo 15 años sin expresarme honestamente con mis amigos chavistas, sin tratar de caer en provocaciones, porque siempre he actuado desde el amor...y este gobierno despierta en cualquiera los sentimientos contrarios....hoy ante el tweet de una amiga que decía lo siguiente:
"15 años soportando guarimbas, sabotajes y una creciente población de especuladores y estafadores. ¿hasta cuando, Apátridas?"
y yo le respondí:
Querida amiga: jamás me había atrevido a escribirte. Estos días he visto tus tweets y he intentado comentarte, pero termino borrándolo, porque te quiero, porque eres mi amiga, porque te conozco y sé que eres un ser de luz y de gran nobleza en tu corazón. Pero, ante lo que he me ha tocado ver y vivir estos días no puedo callarme ante este tweet que, a mi parecer, es sencillamente banal, fuera de lugar, carente de contenido, ridículo y que considero no va de la mano con lo que HOY ha pasado en nuestra ciudad, en nuestro país.
Yo tengo 15 años aguantando que me llamen apátrida, burguesa, escuálida de mierda. 15 años en los que el hecho de vivir en Los Palos Grandes me etiqueta. Vivo con miedo a perder la vida en una esquina. Y el miedo no está en mi cabeza, está en las cifras... 24.763 venezolanos murieron en 2013 en manos de la violencia.
Como dice Nel, en mi partida de nacimiento dice que soy venezolana. Nací en Caracas. Soy más criolla que la arepa. Mi familia paterna es margariteña. Mi familia materna llanera. Fui criada por una mujer descendiente de indios y llaneros, que se pasó la vida trabajando y echándole bolas por sus tres hijas, para que estudiáramos, tuviéramos un techo, comida en la nevera, calidad de vida, sueños...mi mamá vino de abajo Irene. Yo no decidí vivir en Los Palos Grandes, cuando nací ya estaba aquí. Estudié en colegio privado porque para mi mamá la educación pública se estaba viniendo abajo, porque esta descomposición social que vivimos hoy, apenas comenzaba...
Soy servidora pública prácticamente desde que me gradué. Trabajé en dos instituciones rojas rojitas en las que simplemente comprobé todo lo que ya pensaba de este desgobierno: corrupción, recursos despilfarrados en campañas, obligar a marchar con lista de asistencia, fanatismo, resentimiento, preparación militar a civiles, explotación de trabajadores, funcionarios con dos o más cargos, etc... ahora, ya tengo 2 años y medio siendo servidora pública para un gobierno de oposición y mi querida, nada de lo anterior lo he visto hasta ahora. Trabajo con una gente honesta que quiere el progreso y la reconciliación de los venezolanos, que sí quiere hacer país. QUE TRABAJA, NO ROBA. QUE RECIBE A CHAVISTAS Y OPOSITORES POR IGUAL. GENTE QUE ESTÁ HACIENDO PAÍS. Y SOBRE TODO. GENTE QUE NO HABLA DE ARMAS NI VIOLENCIA. QUE NO PROMUEVE EL RESENTIMIENTO. GENTE QUE NO GRITA. Sin duda, lo más preocupante de este des-gobierno es la violencia. Su discurso es violento, es sectarista, es separatista. En 15 años muy pocas veces escuché a Chávez hablar de paz y amor y cada vez que lo hacía no pasaba un día cuando ya soltaba AZUFRE por esa boca. Lo lamento amiga, en esto no puedo ser tu aliada, no puedo acompañarte.
Te quiero y lamento todo lo que estamos viviendo....herencias nefastas de esta revolución: familias divididas, amistades distanciadas, venezolanos muertos, despedidas, tantas despedidas....tu inclusión es hoy mi exclusión. Que Dios te bendiga. Y nos vemos en la calle, ahí donde creo que finalmente podremos reconocernos como iguales, como VENEZOLANOS, como hermanos. ESTOY EN LA CALLE PORQUE YO MEREZCO, TANTO COMO TÚ, SER PODER POPULAR.
Nuestra protesta que empezó a ser por todos los problemas que nos aquejan hoy y que ustedes no pueden negar ni disfrazar ya: escasez, inseguridad, desempleo, crisis hospitalaria, crisis educativa, crisis social, polarización...
Hoy, para mí, se ha vuelto fuertemente en contra de la violencia, de la división...este es el gran mal, el gran cáncer y yo quiero ser parte de su sanación...no con odio, con paz y amor, con entendimiento, con escucha y sobre todo defendiéndolos también a ustedes. porque todos merecemos vivir mejor. vivir en paz. es hora de dejar de ser un guión de los políticos. creo que el gobierno no se ha dado cuenta, pero nos dió un gran arma al quitarnos los medios. ahora nosotros somos los medios y eso nos llena de valor para salir a la calle, para tocar cacerola, para escribirte a ti. que te quiero y respeto, pero por miedo a enemistarnos jamás me había atrevido a disentir de ti, así, tan abiertamente. y disculpa mi descarga. pero estoy indignada. un gobierno que haga de la indignación un arma no merece llamarse gobierno.